En
la segunda Reunión de Ministras, Ministros de Desarrollo Social de
la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que se
desarrolló entre los días 22 y 23 de octubre, el Representante
Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la
Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), Raúl
Benítez, señaló que la región está más cerca de acabar con el
problema de la pobreza y el hambre, e indicóque las mujeres y
hombres de hoy “son la primera generación que puede acabar con el
hambre y hacer que la seguridad alimentaria y nutricional sea
verdaderamente universal”.
El
Representante de la FAO para América Latina y el Caribe resaltó, en
esta importante actividad realizada en la ciudad de Caracas, el
impacto positivo de las excelentes políticas que han surgido en la
comunidad Latinoamericana. Para Benitez, el espacio de la CELAC
“representa una voluntad política que se ha traducido
progresivamente en resultados concretos, entre ellos, el "Plan
CELAC para la Seguridad Alimentaria, Nutrición y Erradicación del
Hambre 2025" (Plan SAN CELAC).
Así
mismo, Benítez indicó que América Latina y el Caribe ha dado un
salto adelante en la lucha contra el hambre y gracias a los esfuerzos
de todos los países de la región, la prevalencia del hambre ha
caído a 5,5% y el número total ha descendido a 34 millones,
convirtiendo la zona en la primera del planeta que alcanzó las dos
metas internacionales de reducción del hambre.
En
este sentido, también afirmó que estos resultados demuestran que
“alcanzar la erradicación del hambre es para todos una meta
posible durante nuestras vidas" y que América Latina y El
Caribe ha logrado ser la región del mundo con más avances, gracias
a que su éxito radica en la combinación de crecimiento económico,
políticas sociales activas y un compromiso político inédito de
parte de los países y sus organismos de integración.
De
igual modo, Benítez subrayó que la CELAC ha asumido un compromiso
profundo con la seguridad alimentaria desde su fundación y esto ha
convertido este espacio de integración regional, en un referente
global de la lucha contra el hambre.
Trabajando
con las directrices de la CELAC
A
partir de la II Cumbre de la CELAC se trabaja en conjunto con la FAO,
ALADI, y la CEPAL, siguiendo una política social centrada en las
personas. Por ello, se solicitó la elaboración del Plan SAN CELAC
que fue aprobado a nivel de presidentes en el año 2015 en Costa
Rica.
Este
Plan busca atacar todos los frentes del problema multidimensional del
hambre y complementa y fortalece iniciativas similares como
Mesoamérica Sin Hambre, los Frentes Parlamentarios Contra el Hambre
y el Plan de Acción “Hugo Chávez Frías” de Erradicación del
Hambre y la Pobreza de Petrocaribe - ALBA.
Erradicar
el hambre no es un gasto
El
Representante de la FAO afirmó ante los ministros y ministras de la
región que “erradicar el hambre no es un gasto, sino una
inversión. Cada hombre, mujer, niña o niño que logra la seguridad
alimentaria se convierte en una semilla de futuro desarrollo,
mientras que si dejamos atrás a solo una persona, será un dolor y
un problema que nos afectará a todos”.
Indicó
además que según cálculos de la FAO, el costo de garantizar que
cada persona de América Latina y el Caribe vivan libres de hambre y
extrema pobreza, representa sólo el 0,13% del PIB regional en
inversiones promedio desde 2016 a 2030”, aseguró.
Además,
insistió en dejar claro que nuestra región puede alimentar a cada
uno de sus habitantes e incluso tener alimentos de sobra para
exportar.
Benítez
reiteró una vez más “el apoyo a la agricultura familiar, las
mejoras del mercado de trabajo, las compras públicas, las redes de
protección social y a la alimentación escolar”, como medidas
necesarias para disminuir las brechas de las inequidades sociales en
la región.
El
gran desafío del sur y El Caribe, es “plantearles un desafío que
nos permita obtener resultados en el corto plazo, basado en la
experiencia del trabajo acumulado durante los últimos 70 años que
estamos cumpliendo como Organización”, detallóBenítez.
Explicó
tres elementos estructurales que servirán para que el Plan SAN CELAC
se despliegue en acción positiva; por lo que primero llamó a que el
mencionado Plan “sea apropiado a nivel nacional, necesitamos
conocer en la escala nacional cuáles son las políticas y qué
estamos haciendo, incorporando a todos los sectores vinculados con la
erradicación del hambre”.
En
segundo lugar, indicó que debemos aceptar que trabajando en conjunto
“nuestros problemas se hacen comunes y logramos avanzar con mayor
decisión, pero es necesario promover mecanismos que hagan efectivos
la cooperación sur-sur solidaria y la construcción de alianzas que
nos permitan una efectiva movilización de recursos y asistencia
técnica”.
Y
finalmente afirmó que se debe “establecer una estrategia de
focalización que permita apoyar a aquellos países que aún tienen
grandes desafíos en la región, en el ámbito de la CELAC, donde
somos coparticipes de un verdadero desarrollo integral”.
Finalmente,
el Representante de la FAO en la región agregó de manera firme y
optimista que “está en nuestras manos generar un presente más
justo y un futuro sin hambre”. (Prensa FAO).
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